Escuelas
El final de los años 40, tras los avatares de la Guerra
Civil, significaron para Villar un momento de su expansión y un bienestar que
se prolongaron durante los años siguientes con la construcción de diversas
instalaciones que cambiaron la fisonomía del municipio. Una muestra de ello es
la creación del Grupo Escolar y de las Casas de los Maestros.
Construido en un solar de unos 1.400 m², el edificio del Grupo Escolar supone una de las mejores muestras de la arquitectura civil franquista del sureste madrileño, con un cuerpo central en forma de H y sendos soportales. Destaca en su interior una escalera de madera, las chimeneas y los solados de baldosa hidráulica, que dan al edificio la misma apariencia que tuvo cuando, en sus inicios, los niños ocupaban la plata baja, reservando la planta superior para las niñas.